Hasta hace un tiempito, el único Generación Dorada que seguía jugando era Carlos Delfino. Pero ya no más, ya que el castelense Rubén Wolkowyski volvió a las canchas para cumplir un sueño de su vida, alguna vez impensado seguramente.

Primer argentino en la NBA, y directamente desde la Liga Nacional, el Colo fue clave en el Oro de Atenas 2004 y a 20 años sigue despuntando el vicio con la naranja. Es que en febrero decidió regresar a jugar en España, donde reside y trabaja como formador. Y lo hizo de la mano de Salliver Fuengirola de la Federación Andaluza en la Primera Nacional, quinta categoría, donde también juega Tomás, su hijo nacido en el 2000. Su último paso por la Liga y el básquet de mayores fue Quilmes de Mar del Plata en la 2014/15.

Sin ir más lejos, el joven -que jugara en inferiores de Quilmes de Mar del Plata y de Unicaja Málaga-, habló con Noticias de Álava y contó lo que se siente: “Es una sensación única estar junto a él en una cancha y poder disfrutar del deporte que a los dos nos gusta. Me encanta. Él se lleva toda la atención de la cancha y jugar con él es muy fácil”.

Ambos son parte clave del equipo, que se clasificó a la Final Four del torneo en busca del ascenso a la Liga EBA. Rubén lleva medias de 11.5 puntos, 6.8 rebotes y 1.6 asistencias en 12 partidos. Por su parte, Tomás es clave en el plantel con 12.4 puntos, 10 rebotes, 2.5 asistencias y 1 tapa.

Fuente: baquetplus.